Unidad Popular Segovia presenta a sus candidatos a las primarias

“Jacobo Peña Conversa y Jose Alberto Castaño Pascual serán los cabezas de lista al Congreso y al Senado respectivamente»

“El pasado día 21 finalizó el plazo de presentación de candidatos y candidatas para encabezar la lista al Congreso y al Senado por Unidad Popular en la provincia de Segovia. Como únicos candidatos, Jacobo Peña Conversa y José Alberto Castaño Pascual serán los cabezas de listas al Congreso y al Senado respectivamente.

“Jacobo Peña es licenciado en psicología. Reside desde hace una década en el Municipio de El Espinar. Ejerce como formador sociosanitario y diseñador de juegos. Ha sido voluntario en proyectos vinculados al VIH-Sida y a la protección de los animales. Actualmente lleva un proyecto de estimulación precoz en el centro de salud de su municipio. Participa en asociaciones de carácter cultural y en la organización de diversos eventos solidarios. José Antonio Castaño es concejal del grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Cuéllar. Participó de forma muy activa en el movimiento 15-m de su localidad, y ahora se presenta al Senado para que dicha cámara cumpla la función de abordar los asuntos territoriales de una República Española federal, laica y solidaria.

“En esta ocasión, cabe resaltar el consenso en la elección de candidatos, y que la suma de fuerzas políticas, sociales y ciudadanas no ha supuesto ni enfrentamientos ni  disputas por los primeros puestos de las listas. Unidad Popular Segovia ha conseguido la unidad no sólo programática sino también electoral, a la altura de las circunstancias político – sociales tan nefastas para la ciudadanía (…).

“Es evidente que son otras fuerzas las que les pueden sus egos y afán de protagonismo. Su actual silencio y falta de compromiso con la ciudadanía les delata. A esto hay que unir la falta de alturas de miras y de lectura del actual momento histórico. Son otros los que apuestan por la indefinición, la división y la teatralización de la lucha político y social.

“Creemos posible y necesario recuperar la soberanía, regenerar y profundizar la democracia, restituir la decencia y la transparencia en el ejercicio de la función pública, defender la universalidad de los derechos humanos y establecer la dignidad, la igualdad, la sostenibilidad, la participación y la justicia como principios rectores de la política. Unidad Popular apuesta por la democracia participativa, por la ruptura con el régimen monárquico de 1978 y la apertura de un proceso Constituyente por la III República, por un Estado federal conformado sobre la base de la libre unión de los pueblos y el derecho a la autodeterminación como derecho democrático básico e inalienable, por la separación efectiva de la Iglesia y el Estado y por la promoción de estructuras, organismos o espacios de participación popular en los asuntos públicos en todos los ámbitos territoriales.

Carta de reivindicaciones aprobada en el Encuentro Estatal de colectivos de Memoria Histórica y de Victimas del Franquismo

HACIA LA III REPUBLICA

Las organizaciones republicanas, manifestamos que resulta imposible concebir un programa de izquierda realmente creíble que no proponga cambiar de raíz el modelo político establecido en España durante la transición y del que la Constitución de 1978 es su máxima expresión programática.

Desde entonces, como ocurriera antes, las grandes decisiones que han afectado a la mayoría trabajadora se han impuesto de forma antidemocrática (es el caso de la entrada en la Unión Europea y la desindustrialización que llevó aparejada, la firma del tratado de Maastricht, la entrada en la zona euro, el tratado de Schengen y las sucesivas reformas y recortes dictados desde Bruselas, la implicación en la guerra de Irak, etc);  o en consultas amañadas en las que el Gobierno de turno incumplió después todos los compromisos adquiridos (como en la entrada en la OTAN, que realiza ahora, por cierto, las mayores maniobras de su historia, en España y a espaldas de los ciudadanos).

Las consecuencias, todos estos años, las han sufrido las clases populares: cada vez que una crisis amenazaba con reducir los beneficios de la minoría en el poder, se recortaban los derechos políticos, sociales y laborales de la mayoría.

La práctica del Gobierno de Rajoy es la mejor prueba de lo que decimos: en sus cuatro años de mandato ha impuesto arbitrariamente una larga serie de recortes que afectan a la mayoría trabajadora en todos los órdenes de su vida: reforma laboral, liquidación del sistema nacional de salud, ley mordaza, reforma del Código Penal, contrarreforma educativa; etc

Ahora, a las puertas de una elecciones generales, las del próximo 20 de diciembre, que deberían significar el fin del bipartidismo y el triunfo de la izquierda, el surgimiento del “ciudadanismo”, ha terminado por borrar los objetivos políticos transformadores de las principales opciones de la izquierda y abrir la puerta a la derecha populista que representa “Ciudadanos”

En las próximas elecciones del 20 de diciembre, muchos  dirigentes políticos hablan de “unidad popular” al margen de las reivindicaciones políticas vitales para  hacer posibles los objetivos que se marcan en sus programas y que dan sentido pleno a ese término.

Y entre esas reivindicaciones políticas, hay dos trascendentales para hacer avanzar los intereses de la mayoría trabajadora: la ruptura con el régimen monárquico y la constitución de una República Popular y Federal que garantice las conquistas pasadas y los avances futuros.